Es muy conveniente que los católicos hablen de María Corredentora porque fue la voluntad del Dios, Trino y Uno, crearla inmaculada para que colaborara en el plan de salvación. El fiat de la Esclava del Señor permitió la encarnación del Verbo. Julio Ricardo Castaño Rueda.

¡Estimado Redactor, Salve María!
ResponderEliminarCoincido plenamente con la afirmación presentada. Reconocer a la Santísima Virgen María como Corredentora implica comprender su papel singular y libre en la historia de la salvación. Su expresión máxima de obediencia y fe, constituye el punto de encuentro entre la gracia divina y el ser humano. Dios Todo poderoso, contó con la Virgen Inmaculada, haciendo de ella no una mera espectadora, sino una participante necesaria en la redención.