Por Julio Ricardo Castaño Rueda
Sociedad Mariológica Colombiana
Colombia se ahoga entre los
tinteros de los gacetilleros cuyas diatribas manchan la historia de la patria
de María.
Los párrafos peyorativos contra
el presidente de la República suelen ir acompañados de frases socarronas relativas
a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá. Esa conducta es el nuevo vicio de
la mediocridad mediática de los redactores.
Los columnistas volvieron moda
el insulto al mandatario con el agravante de la decadencia por falta de
originalidad, cualidad superior de las mentes brillantes.
La ausencia de un leve destello
de genialidad impuso el imperio de la banalidad en el periodismo sin editor.
Así, el lector debe soportar la impertinencia, el chascarrillo, la ironía, la
falacia y el insulto contra la Madre de Dios como parte de un texto construido
entre la ignorancia religiosa, la protesta política y la prisa vulgar por
denostar de la axiología nacional.
La prensa contemporánea debería
estudiar el origen del arte divino de la creatividad: “En el principio existía
la Palabra y la Palabra estaba con Dios” (Jn, 1). Sí, el verbo es sagrado y por
tanto no es apto para que los aprendices del oficio jueguen a la intelectualidad
reaccionaria con el legado cultural de la Santísima Virgen, signo sagrado de un
país heroico.
El derecho de expresión incluye
el deber sublime de no convertir las cuartillas, recurso esencial
del pensamiento, en una perorata de sicofantes.
La ignorancia siempre atrevida, tristemente se despliega en la prensa mediocre, para confundir más a quienes no hallan otra manera de alimentar sus mentes...
ResponderEliminarApreciado, Julio,
ResponderEliminarNo se puede esperar menos de un fragmento invasivo de la sociedad al que se le gangrenó la conciencia, la moral, los valores y cuando menos el respeto a las creencias sagradas del otro. El país se calcina a fuego lento de la mano del individualismo que clama ser validado por la masa… “la única verdad legítima es mi verdad” y todos deben plegarse a ella… de eso no germina sino el exterminio de
la intención social de la genética humana y, con ello, el cadalso para los mínimos de la convivencia, para los imperativos categóricos kantianos. Muere la sociedad de la mano de la perversa inmoralidad que significa el irrespeto a la convicción espiritual de sus hermanos en la biología. Y si no hay temor de Dios…solo habita el coraje de la autodestrucción.
Es una pena que los aludidos sicofantes no comprendan ni un solo párrafo de este escrito...
ResponderEliminarLa Mamertologia que amenaza nuestra democracia acompañada de odio resentimiento y un pueblo deshumanizado, un pueblo q como dice Julito ha gangrenado su consciencia frente a un tema tan relevante como lo es el aborto se nos ha olvidado q la píldora del día despues los contraceptivos dispositivos y demás locuras que nos han esclavizado a la humanidad ATRAE LA JUSTA IRA DEL SEÑOR no solo en Colombia sino en el mundo entero por eso el Comunismo acecha las economías más aún las subdesarrolladas y viciadas como la nuestra se nos olvidó respetar al señor esta crisis de valores arrastra consigo la gangrena de nuestra inconsciencia al OMITIR la defensa de la vida desde la CONCEPCIÓN Mao Riveros es una persona que me ayudó a redactar y a defender en muchas situaciones la defensa de la vida y hoy también mi gran amigo Julio con el cual hemos compartido y entendido tantos argumentos en la misma línea ahora nos queda rezar el santo Rosario y buscar soluciones a corto plazo porque para mí concepto en tan poco tiempo es tan difícil REPARAR Y SANAR ESTE GRAVÍSIMO PECADO q la sangre de estos santos inocentes clama justicia al cielo y definitivamente así como el COVID el Comunismo será para Colombia y para el mundo un medio de reparación sanación y liberación muy grande DIOS LOS BENDIGA INMENSAMENTE SIEMPRE.
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